Cualquiera que esté un poco familiarizado con el uso de Internet y que en algún momento hay estado buscando trabajo, se ha metido en uno o varios de los diferentes portales de empleo que llevan funcionando desde hace años.
La manera de funcionar de los portales de empleo (tipo infojobs, monster, InfoEmpleo, etc) son considerados por los que controlan el mundillo informático como de tipo 1.0, mientras que a las redes sociales profesionales se las considera propias de la clase 2.0. La diferencia radica en la posibilidad de interacción permanente de usuario en el caso de las herramientas 2.0. Mientras que en los portales de empleo introduces tus datos laborales, te apuntas a ofertas de trabajo y esperas a que alguna empresa te llame (proceso automático e impersonal) en las redes profesionales, aunque el trato sea virtual, es tú a tú, persona a persona.
Según lo que cada uno busque o pretenda pueden encontrarse más ventajas en uno o en otro tipo de aplicaciones informáticas. Por ejemplo, los portales de empleo tienen (de momento) mayor número de ofertas, con una clasificación más convencional. También llevan más tiempo y cuentan con la inercia de las empresas que llevan usándolos como fuente de candidatos desde hace tiempo. En cambio en las redes profesionales son mucho más jóvenes, tienen mayor número de posibilidades pero hay que aprender a utilizarlas y dedicarles tiempo para sacarles provecho, y como ya está dicho, aportan una comunicación y participación mucho más personal; tanto empresa como demandante de empleo pueden expresar de forma más concreta sus cualidades y expectativas más específicas.
«Lo nuevo», las redes, están destinadas a sustituir a los portales de empleo. Todos los especialistas aseguran que su versatilidad supera con creces la de los portales de empleo. Y auguran que acabarán por enterrarlos. No en vano éstos se renuevan e incorporan en sus estructuras formatos y novedades que imitan en parte a las redes. Pero de momento no dejan de ser eso: augurios. Los datos recogidos por diversos estudios demuestran que hoy por hoy la mayor parte de la sociedad que busca trabajo lo hace por medio de los portales «tradicionales» (sí, en el ámbito informático, 10 años ya otorgan la categoría de «tradicional»). Y la mayor parte de empresas que ofrece trabajo por medio de Internet lo hace a través de los portales de empleo.
¿Has usado alguna vez los servicios de un portal de empleo, ¿eres usuario de alguna red profesional? ¿qué crees que es más útil para encontrar empleo?